viernes, 2 de mayo de 2008

La Mochila


Cargad con vuestro equipo, como hombres.


La Mochila es el acompañante del explorador y con ella se establece una relación de amor o de odio, dependiendo de cómo la armaste y el peso que llevas. En el comercio se pueden encontrar varios modelos y tipos; debes elegir la que te sea más cómoda. Es fundamental que tenga una gran capacidad y la mayor cantidad posible de bolsillos y de divisiones. El que sea impermeable es un factor importante pero no determinante; las de lona se pueden proteger con una bolsa plástica.

Características de la Mochila

Hay mochilas que tienen armazón y otras que no, siendo estas últimas, por lo general, más pequeñas. Las armazones pueden ser metálicas o de fibra de material plástico, diferenciándose sólo por su flexibilidad. Estos últimos distribuyen mejor el peso de la mochila y la mantienen separada de la espalda por bandas de nylon, permitiendo una mejor ventilación y evitando en parte la transpiración. Por lo general, las correas debieran ser anchas y acolchadas. Son recomendables las mochilas que tienen cinturón para la cadera.

Al comprar una mochila, pruébala primero y asegúrate de que si posee armazón ésta no se te clave en la espalda. El tamaño de la mochila tendrá que adecuarse a tu estatura. La unión del arnés y las correas debieran estar por lo menos a unos 5 ó 6 cm del hombro, quedando el cinturón sobre la cadera. Revisa todas las costuras y verifica la calidad de las cierres y su buen funcionamiento.

Preparación de la Mochila

Antes de empacar, reúne todo el equipo que vas a llevar y agrúpalo según su relación, para que lo guardes en bolsas plásticas. Considera la mochila como un contenedor de bolsas y no como una bolsa de objetos. Al embolsar el equipo podrás clasificarlo, ordenándolo según el uso, lo que te permitirá encontrar rápidamente las cosas.

En el interior de la mochila, coloca cosas blandas contra la espalda, que amortiguarán su peso. El equipo liviano y todo aquello que no usarás inmediatamente, deberá ir al fondo de la mochila. Los objetos pesados arriba y cerca de la espalda. En los bolsillos colocarás el equipo de apoyo y de uso continuo. No dejes en ellos cosas delicadas o de mucho valor; por lo general, los bolsillos se golpean o rozan con mayor facilidad. Además, siempre ubica en la parte superior el equipo para la Lluvia.

La mochila no puede llevar más del 20% de tu peso y todo el equipo debe estar bien sujeto y no sonar al caminar. Por lo mismo, es recomendable armar y desarmar la mochila cuantas veces sea necesario, hasta lograr que ésta se vea y se sienta compacta. Un buen "zamarreo" de prueba, sin que suene o se le suelte algo, es la señal de su óptimo funcionamiento

1 comentario:

Anónimo dijo...

NUNCA BAJARSE LA MOCHILA DEL HOMBRO
POR UNA PIEDRA EN EL CAMINO =)


SERVIR !!
T QIIERO HERMANOO =)

IOR